Llegada al aeropuerto de SEVILLA y recogida para traslado a la ciudad, acompañados de una guía turística, haremos una visita panorámica de unas 2 horas de duración, de los monumentos más importantes como la Universidad, antigua Fábrica de Tabaco, el Palacio de San Telmo, la Torre del Oro, el Puente de Isabel II, la Basílica de la Macarena y visita de la Plaza de España, la obra más emblemática de la Exposición Iberoamericana de 1929. Fin de la visita en la zona centro. Tras la panorámica almuerzo en restaurante concertado y tiempo libre para visitar esta hermosa ciudad. Salida hacia Chiclana de la Frontera, para hacer Checkin, cena en el hotel y alojamiento.

Desayuno en el hotel y salida hacia la espectacular Sierra de Grazalema, donde llegaremos al pueblo El Bosque y desde ahí iniciaremos, acompañados por un guía de montaña, una ruta a lo largo del Río Majaceite. Se trata de una ruta lineal de unas 2 horas aproximadamente de duración, y que es sin duda uno de los senderos más practicados y visuales del parque natural. La facilidad de su recorrido y el hermoso paraje que atraviesa lo hacen idóneo para el caminante. Las dos poblaciones, El Bosque y Benamahoma, principio y final, son otro atractivo añadido. En ambas podremos disfrutar de sus calles, sus caseríos serranos enclavados en un paisaje rebosante de naturaleza, que nos permitirá ampliar y disfrutar al máximo la jornada. Tras la ruta almuerzo en restaurante concertado y salida hacia Arcos de la frontera, puerta de entrada a la Ruta de los Pueblos Blancos, Arcos está considerado uno de los pueblos más bellos de España. Existen huellas de sus primeros pobladores prehistóricos y romanos en el yacimiento de la Sierra de Aznar, pero a quien debe la ciudad su impronta y actual fisonomía es a la cultura musulmana. A través de estrechísimas y empinadas calles y bajo antiguos arcos, el visitante se aproxima a su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico, donde se conservan joyas monumentales como el castillo de los Duques (s. XV), la Puerta de Matrera (ss. XIXIV) y los restos del recinto amurallado, sus palacios y casas señoriales, la basílica de Santa María, la iglesia de San Pedro, además de numerosos templos, capillas y conventos. Regreso al hotel para la cena y alojamiento.

Desayuno en el hotel y a continuación, salida hacia ZAHARA DE LOS ATUNES. Antiguo asentamiento pesquero, centrado en centrada en la almadraba (el arte con el que se captura el atún rojo) y convertido hoy día en un enclave turístico con hoteles y residencias al pie de una de las playas más bonitas de Andalucía. Después visitaremos CONIL DE LA FRONTERA. A pesar de su enorme ambiente turístico este caserío blanco de urbanismo andalusí ha sabido mantener el sabor y el encanto de las villas marineras. Fue puerto de innegable importancia durante las épocas romana y visigoda y aún conserva las fortificaciones medievales como la Torre de Guzmán, que formaba parte del antiguo castillo en torno al cual se formó la población y las torres vigía de Roche, Puerco y Castilnovo (ss. XVI y XVII) desde dónde se avistaban los posibles ataques piratas o invasiones. Regreso al hotel para el almuerzo. Por la tarde nos acercaremos a CÁDIZ para realizar una visita guiada de la ciudad con guía local y así introducirnos en el ambiente carnavalero propio de las fechas, con sus carruseles de corros cantando
sobre bateas (carrozas), ofreciendo sus tangos a los miles de personas que abarrotan las calles y la cabalgata, el desfile de las agrupaciones y las carrozas. Cena por cuenta de los clientes. Tiempo libre para disfrutar hasta la media noche de este ambiente carnavalesco. Traslado al hotel en autocar.

Desayuno en el hotel y salida hacia JEREZ DE LA FRONTERA: gracias a su vino -el “jerez” o “sherry”-, la tradición ecuestre y taurina, el flamenco y el motor, el nombre de esta ciudad andaluza hace mucho tiempo que traspasó fronteras. Hasta sus alrededores llegaron los fenicios hace 3.000 años para fundar la colonia llamada Xera, la ciudad que más tarde se llamó Ceret bajo el dominio romano, y Sheres o Xeres cuando fue fortaleza árabe. Con los Reyes Católicos se inició el próspero comercio de sus famosos vinos con los ingleses. Los musulmanes dejaron una honda huella en la ciudad, como el trazado urbanístico de los barrios enclavados en el corazón de la antigua medina árabe: San Lucas y San Mateo, que acoge su iglesia homónima, la plaza del mercado (sede del museo Arqueológico) y el palacio Riquelme. Pero sin duda el vestigio andalusí más importante es el alcázar de Jerez, en el interior del recinto amurallado la mezquita, los baños árabes y el jardín de los Olivos, con albercas y fuentes que armonizan a la perfección con el palacio barroco de Villavicencio, erigido sobre las ruinas del primitivo palacio islámico y en cuya torre el visitante puede visitar la original cámara oscura. Muy recomendables también las visitas al Palacio Domecq y al Palacio Virrey Laserna, que forman parte de la historia de la localidad jerezana. A media mañana, realizaremos una visita guiada con cata y degustación de vino de dos vinos, en las famosas BODEGAS DE TÍO PEPE (entrada incluida). Almuerzo en restaurante concertado. A primera hora de la tarde salida hacia el aeropuerto de Sevilla para tomar el vuelo con regreso a Tenerife Norte. Fin de nuestros servicios.